Muere de cáncer en Constantinopla, la emperatriz Teodora, esposa del emperador Justiniano I que, con su decidida actitud, salvó la vida y el trono de su marido durante la sublevación de Nika del año 532. Al ser corregente junto a su esposo, tuvo gran influencia en la política del imperio de Oriente y se encargó de dictar diversas leyes para proteger los derechos de la mujer. En sus orígenes fue actriz del circo y Justiniano, para casarse, hubo de anular la prohibición existente contra los matrimonios entre la nobleza y ex actrices. (Hace 1476 años)