William Penn, recibe del rey Carlos II de Inglaterra, que está en deuda con el padre de Penn, una cédula real que le otorga una amplia zona del oeste y sur de Nueva Jersey (EE.UU.), en la que también se indica que tendrá poder casi ilimitado sobre la nueva colonia, a la que Penn llama la zona Sylvania (bosque en latín), pero que Carlos II prefiere llamar Pensilvania en honor de los servicios prestados por el padre de Penn. En ese territorio, William Penn tiene la esperanza de proporcionar un refugio en el Nuevo Mundo para los cuáqueros y otra gente perseguida donde construir una comunidad basada en el ideal cristiano. De este modo, el rey Carlos II mata dos pájaros de un tiro: por un lado salda la deuda con los Penn y, por otro, tiene un lugar en el que religiosos y políticos (como los cuáqueros o los "Whigs", que solicitan más influencia de los representantes del pueblo) pueden encontrar su propio sitio, lejos de Inglaterra. (Hace 343 años)